Lo que está pasando

PUERTA SOLUCIÓN

Es maravilloso acudir a un lugar en el que muchísimas personas desean compartir su indignación por un sistema en el que no se sienten bien. Todos juntos sentimos que podemos cambiar esta realidad que no nos gusta, espero que sea cierto aunque, desde luego, en la primera ocasión que hemos tenido para demostrárselo al sistema parece que hemos fracasado. Ayer me entristecí profundamente tras los resultados electorales, hubo un momento en que pensé en tirar la toalla pero entonces recordé mi carne de gallina de estos días, mi sincera emocion participativa de la semana pasada, y decidí continuar. Por ello hoy me dirigiré a Sol con esperanza de que nuestra indignación haya crecido en lugar de desvanecerse.

El jueves 19 me incorporé al movimiento en la Puerta de Sol, era un poco tarde pero fue el momento en que pude hacerlo. Allí había muchísima gente y lo que podíamos hacer la mayoría era compartir un espacio de protesta, luego he sabido que hay muchos grupos de trabajo a los que te puedes apuntar pero no puedo comprometerme en casi ningún horario, de todas formas espero poder pasarme por sus reuniones algún día de estos.

El viernes 20 y sábado 21 fui a la acampada de Donosti. El primer día estuve en varios grupos de trabajo, escuchando las opiniones y aportando la mía, era preciosa la sensación de estar construyendo un mundo nuevo, soñar que todo es posible. Posteriormente se hizo una reunión que resultó algo cómica por la cantidad  de borrachos que acudieron a opinar, en cualquier caso se dijeron cosas muy interesantes como que la protesta debía continuar de forma coherente y fijar un día al mes o a la semana para reunirnos ya que prolongar la acampada diaria iba a ser muy difícil. También se comentó la importancia de fortalecer la unidad a través de la emoción compartida, especialmente en las asambleas multitudinarias.

El sábado 21 acudí en Donoti a la asamblea en cuestión. Comenzaron con una grabación de una llamada a la radio nacional que ya había escuchado y posteriormente leyeron las propuestas consensuadas por los grupos de trabajo. Después abrieron un turno de participacion en el que cada uno hablaba sobre lo que le apeteciera, fue muy interesante y se dijeron muchas cosas con el corazón.

Esto es todo lo que puedo decir hasta ahora, hay que continuar peleando pero lo más importante es que nuestra sociedad salga fortalecida de esto y cada uno de nosotros más concienciados como ciudadanos para hacernos cargo de nuestras responsabilidades y deberes y para participar cotidianamente.